Después de unos días ausentes, pues hemos estado de romería con San Cecilio (... y comiendo algún pionono), volvemos a nuestra querida Alhambra.
Y lo hacemos a su bosque, ese bosque que como el de las leyendas de Irving se torna misterioso pues protege tesoros inabarcables para los hombres que lo pasean.
Los granadinos siempre hemos paseado por él como por el enorme jardín de quien se sabe privilegiado por tener una gran casa.
Los recuerdos infantiles en el bosque, sobre todo en las mañanas cálidas de verano, buscando su frescor, forman parte de la memoria de todos aquellos que fuimos chiquillos subiendo y bajando por sus caminos y jugando con las hojas en sus cauchiles de agua cantarina.
Y lo hacemos a su bosque, ese bosque que como el de las leyendas de Irving se torna misterioso pues protege tesoros inabarcables para los hombres que lo pasean.
Los granadinos siempre hemos paseado por él como por el enorme jardín de quien se sabe privilegiado por tener una gran casa.
Los recuerdos infantiles en el bosque, sobre todo en las mañanas cálidas de verano, buscando su frescor, forman parte de la memoria de todos aquellos que fuimos chiquillos subiendo y bajando por sus caminos y jugando con las hojas en sus cauchiles de agua cantarina.
Una Visita A Granada La Alhambra 4 El Bosque
View more presentations from AM GCH.
Y como siempre unas fotillos personales, recientes de esta pasada Navidad en una mañana fría y nublada, pero muy fotogénica.
Saludos alhambreños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario