sábado, 19 de septiembre de 2009

Las Iglesias del Albayzín

Hola a todos de nuevo, granaínos y granaténsicos. Este fin de semana... no He Vuelto a Granada... y me tengo que conformar con dar un paseo virtual, con mis fotillos.

Propongo un largo paseo, que recorre de norte a sur y de arriba abajo todo el Albayzín, a la búsqueda de sus Iglesias: Iglesias ricas y pobres, deslumbrantes y modestas, antiguas mezquitas y de nueva planta (las menos).
El Albayzín, "el barrio de barrios" se conforma mediante asentamientos de pobladores que van teniendo en común profesiones, relaciones de familia o amistad. En su entramado de calles se van construyendo mezquitas con sus aljibes para las abluciones y el consumo doméstico. Con la conquista cristiana, dichas mezquitas se van reconvirtiendo en Iglesias, muchas de ellas con alarifes mudéjares, que imprimen sus peculiares estilos (sobre todo las lacerías y los azulejos en su exterior, y las exquisitas techumbres en el interior de los templos).
Este proceso es digno de leer y aprender en el precioso libro editado por Comares, "En busca de la Granada Andalusí" de los profesores Orihuela Uzal y Castilla Brazales.
Quiero comenzar el paseo con una presentación de diapositivas, que forma parte de la serie ya iniciada y que continuaré en proximas fechas. Espero que guste y sirva para pasear buscando la belleza.
Como complemento a esta presentación, no me resisto a mostrar algunos de estos templos desde la sublime atalaya de San Miguel Alto en el mítico cerro del Aceituno.
San Miguel Alto tiene un muy buen acceso desde la antigua carretera de Murcia y es un sitio muy tranquilo para pasear y meditar. Lo recomiendo vivamente.
La primera iglesia es San Nicolás. En la foto se aprecia justo delante el tejadillo del Centro de Salud y un torreón de la muralla Zirí, de los pocos que quedan intramuros.
La segunda es San Cristóbal, la de La Estrella (Virgen de la Estrella, una de las Vírgenes del Jueves Santo albayzinero).
La tercera, la preciosa San Bartolomé con su singular torre mudejar, y sus azulejos perfectamente conservados.

La cuarta, San Luis, la hermana pobre del Alto Albayzín, la que sucumbió a cargo de los amigos de los de la memoria histórica y ahí se quedó, como muestra de la barbarie y la sinrazón, de la demagogia y el odio.

Y la quinta, la Colegiata del Salvador, también destruída en el vendaval anticlerical republicano de los años 30 (siglo XX, claro) pero que fue reconstruída, a mayor gloria del gran Diego de Siloé, maestro constructor de su planta y fachada principal.

Espero que lo hayas disfrutado. Un abrazo paisanos y demás bloggeros.

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